El curso que da cumplimiento a la Ley Micaela consiste en una capacitación obligatoria en materia de género y violencia contra las mujeres para todas las personas que se desempeñen en el Poder Judicial en todos sus niveles y jerarquías. Esta capacitación es organizada por la Oficina de la Mujer del Poder Judicial de la Ciudad y de la Corte Suprema de Justicia de la Nación junto con el Centro de Formación Judicial.
La actividad comenzó con una mesa de apertura en la que participaron Marcela De Langhe, jueza del Tribunal Superior de Justicia; Ana Salvatelli, titular del Centro de Justicia de la Mujer; Luciana Gagniere, en representación de la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación; Liliana Tojo, titular de la Oficina de la Mujer de la Ciudad; Lucía Burundarena, titular del Observatorio de la Discapacidad del Consejo de la Magistratura y Gisela Candarle, secretaria de Coordinación de Políticas Judiciales.
En su intervención, la titular del CJM, reflexionó sobre la importancia de impulsar estas capacitaciones en materia de género dentro del Poder Judicial y las ventajas de este curso de formación organizado de manera conjunta con la Corte Suprema de Justicia de la Nación, para que, por ejemplo, la certificación sirva no sólo a nivel local sino en todas las jurisdicciones. Otro de los temas que abordó Salvatelli, fue la predisposición por incorporar nuevas herramientas por parte de todas las personas que han participado en los encuentros de formación, “siempre nos sorprende este público, porque está muy ávido de aprender”, afirmó y felicitó a todas las personas presentes por su compromiso.
Luego, Liliana Tojo, se refirió al trabajo realizado a lo largo de este año, hizo hincapié en la cantidad de personas que se capacitaron que fueron más de 900 en tres convocatorias. Asimismo, se refirió a la accesibilidad del curso y el trabajo que realizaron para poder alcanzar esas metas.
Marcela De Langhe afirmó la relevancia de estos espacios de encuentro y formación por dos aspectos: por un lado, para que la información sobre qué es violencia de género llegue a más personas porque hay mucho desconocimiento sobre estos temas, y en muchos casos no se reconocen las propias vivencias como violencia de género, incluso dentro del ámbito laboral del Poder Judicial. Por otro lado, también se refirió a la importancia de esta formación para alcanzar una identidad, nos hace compartir una mirada y una forma de abordaje de las violencias por motivos de género.